¿Que se puede hacer para mejorar los resultados en la pesca con mosca?

Aquí te doy 16 razones para mejorar tus éxitos en la pesca con mosca. 

1. Las cuatro reglas de la pesca con mosca:

1º regla. El aspecto más importante de la pesca con mosca está en presentar la mosca en el lugar adecuado en el momento justo. Si no puedes hacer esto, no importa donde esté la mosca, si el pez no la ve, no podrá tomarla. El lugar adecuado no significa que sea sólo sobre la superficie del agua, sino también a la profundidad correcta. Entonces, ¿que elementos del equipo de pesca tiene más importancia a la hora de lograr nuestro propósito? La respuesta es clara, primero y más importante es el bajo de línea bien equilibrado. En segundo lugar la línea de mosca.
Si quieres llegar hasta un pez que se está alimentando en el fondo de un lago con una ninfa libiana, la mejor mosca y la mejor caña del mundo no te harán conseguirlo si has elegido mal el bajo de línea y la línea de mosca.
El bajo de línea, línea de mosca, caña y mosca , son con mucho los componentes más importantes del equipo del pescador con mosca, y estan clasificados en ese orden de importancia.

2º regla. Has tenído éxito presentando tu mosca en el sitio adecuado y en el momento justo, pero todavía no has ganado nada, debes provocar al pez para que tome tu mosca. En este aspecto, la consideración más importante es el comportamiento de la mosca no la elección de la mosca. Aquí factores tales como el tamaño, grosor, rigidez y equilibrado del bajo de línea son primordiales.

3º regla. Por fín, nuestra mosca ahora es importante. El pez tiene que ser engañado para que tome esa mosca. Como norma general nuestra mosca tiene que comportarse como una natural: aparecer donde lo haría una natural y mostrarse ante el pez como lo haría una natural. El pez por fín toma tu mosca, pero todavía no has ganado la partida, aunque a veces, para algunos pescadores, eso ya es más que suficiente.

4º regla. ¿Y ahora, qué? ¿Tienes que clavar... no? Está fuera de toda duda que, si pescas a ninfa con poca o mucha tensión de línea, no tendrás la más mínima oportunidad de detectar al pez tomando la mosca, por eso es tan efectiva la pesca al hilo, porque siempre estamos en contacto directo con las ninfas.
De nuevo la combinación bajo de línea y línea de mosca es vital. Deves estar en contacto con la ninfa, y esta comunicación va más allá de la detección de la "picada". Es una comunicación en dos sentidos, porque ahora lo que necesitas es responder clavando el anzuelo en la boca del pez. Otra vez más, el elemento más imortante es la combinación bajo de línea y línea de mosca, por supuesto con tu caña jugando un papel importante , pero secundario.

Ahora tienes que trabajar al pez con inteligencia y llevarlo a la red. Aquí la combinación de caña, línea de mosca, bajo de línea y mosca, son una cadena tan fuerte como el más débil de sus eslabones.
Pensarás que estas cuatro reglas de la pesca con mosca son obvias. Sin duda lo son, pero se olvidan con bastante frecuencia y son fundamentales para entender lo más básico de la pesca con mosca.

2. Dedicar menos tiempo a lanzar y más tiempo a observar.

-"Emparejar la eclosión" o "hacer coincidir la eclosión" es la piedra angular de la pesca con mosca. Seleccionar la mosca adecuada que más se parezca al insecto que los peces están comiendo y presentarla en el nivel adecuado es clave. Si las truchas están convirtiendo una eclosión de Ignitas en un festín, no tiene sentido tratar de atraerlas con un fantasma gris mucho más grande y oscuro como es la mosca de la piedra. Haz lo que te diga el río. Si están emergiendo Ignitas y los peces están comiendo emergentes de Ignitas, presenta a los peces una emergente de Ignita, no te limites a presentarlas otra mosca diferente o anudar una ninfa llamativa de brillantes colores que no imita nada de lo que se están alimentando los peces. Los ríos trucheros son a menudo como libros abiertos, haz lo que te dice el sentido común y serás recompensado.

-La observación y la paciencia son claves para capturar peces en ascenso. Deves estar dispuesto, si es necesario, a esperar la aparición de moscas en el río y a esperar que suban los peces. De hecho, debes pescar con tus ojos y tus pies antes de pescar con tu mosca.
Si todo eso que te digo te suena como una tarea difícil, tienes que saber que lo es, pero eso es lo que en la mayoría de los casos se necesita para capturar truchas con mosca en ascenso. Y cuando todo eso se combina, no se de una experiencia más gratificante en la pesca con mosca.

3. La preparación es clave.

El comportamiento de las truchas puede verse afectado por factores que cambian de un día para otro, incluso pueden cambiar en un mismo día como los caudales de los ríos, la temperatura ambiente, la temperatura del agua, la presión de pesca en un determinado tramo, etc. Planificar con estos factores en mente, pueden mejorar los resultados y consecuentemente obtener más diversión. Preparar el equipo la noche anterior también puede mejorar nuestros resultados evitando que se olviden algunas cosas importantes como la sacadera, el chubasquero, o incluso las botas de vadeo. Ten en cuenta que tu día de pesca comienza mucho antes de llegar al río. A menos que vayas acompañado por un guía profesional, no puedes esperar que todo te salga bien si no preparas adecuadamente la jornada de pesca.

4. Valorar más la precisión sobre la distancia.

Con mucho gusto cambiaría la capacidad de lanzar grandes distancias por la habilidad de acercarme sigilosamente a una trucha sin espantarla. Mi recomendación en este sentido es que utilices unas buenas gafas polarizadas. Prefiero olvidar mi caña en casa que mis gafas polarizadas. Observar a los peces con buenas lentes polarizadas y ver como reaccionan a la presentación de nuestras moscas es clave en muchas situaciones de pesca, además de proteger nuestros ojos de los dañinos rayos solares y de un posible acídente con el anzuelo.

Entre los pescadores con mosca hay un dicho que dice: "un lanzamiento preciso captura peces". Cuanto más preciso coloques tu mosca, más peces y más grandes pescarás. Por supuesto, suponiendo que otros factores tales como la presentación, suavidad en la posado, deriva natural de la mosca, etc, sean iguales de buenos. Pocos, si es que hay alguno de los pescadores expertos que conozco se opondrían a este concepto. Sin embargo, ¿es posible que colocar nuestra mosca con demasiada precisión pueda dar lugar a que las truchas la rechacen? Esta es una pregunta que, en mi experiencia personal, rara vez se hace, o incluso se llega a considerar, pero que en determinadas situaciones nos deberíamos plantear.

5. No te quedes en casa, sal a pescar cada vez que puedas.

La práctica hace al maestro y perfecciona las habilidades. En realidad, la práctica perfecta hace la perfección. Practica por ejemplo el atado de tus nudos favoritos y de otros nudos que has aprendido recientemente para que puedas cambiar de mosca o ajustar tu bajo de línea rápidamente, en cualquier circunstancia. Demasiados pescadores no cambian de mosca porque no están seguros de poder atar rápidamente un nuevo patrón.
-Aprende a leer las aguas de un río. Los pescadores que tienen la capacidad de leer el agua de un río suelen discernir dos cosas: dónde es problable que estén los peces y dónde no. Ambos son extremadamente importantes. Cualquier pescador con mosca digno de ese nombre, debe esforzarse en comprender lo básico de las corrientes de los ríos y los lugares donde las truchas tienden a posicionarse dependiendo de las circunstancias del momento. No necesariamente se necesita un  título de posdoctorado en hidrodinámica, pero si se necesita entender donde encontrar peces si se quiere tener un mínimo de garantia de éxito. Un buen pescador con mosca lee constantemente el río: evalúa el flujo, las corrientes, la profundidad, busca rocas y piedras grandes que rompan el flujo normal y creen remansos, busca ramas sumergidas y considera las características de las orillas para determinar donde estarán los peces.

6. Practica tu lanzado

Practica tu lanzado y aprende a presentar correctamente la mosca de diferentes maneras: con rodados, doble tracción, en arco y flecha, incluidos lanzamientos laterales de revés, de alcance, en línea recta, en curvas "S", etc. Todo mientras te concentras en la precisión. En mi experiencia personal, lo mejor que pueden hacer los pescadores noveles y los que no lo son tanto para mejorar su éxito y placer en la pesca con mosca es mejorar su lance. Nada más es ni remotamente tan importante. Si puedes controlar tu línea de mosca, tu bajo de línea y tu mosca, te encontraras en el agua con confianza, sea en un río pequeño o grande, enmarañado o abierto, y lo más importante, te divertirás mucho más. Por el contrario, si no dominas las diferentes formas del lanzado, tu experiencia en la pesca con mosca se verá muy limitada y frustrante. Una vez que domines la mecánica del lanzado, mejorará notablemente tus resultados y llevarás más peces a la red.
Aprende todo lo que puedas sobre el lanzamiento con mosca y luego practica siempre que tengas la oportunidad. Conocer todos las formas del lanzado con sedal pesado no es tán difícil como muchos creen, sólo se requiere un poco de práctica y si es posible un buen maestro.

Cuando la mayoría de los pecadores con mosca deciden mejorar sus habilidades de lanzamiento, generalmente comparten una lógica similar para hacerlo. Piensan que un mejor lanzamiento los hará mejores pescadores, lo que a su vez los llevará a capturar más peces. Y en mi experiencia como pescador con mosca durante muchos años, esto es exactamente lo que sucede. Así que es una razón perfectamente sólida para querer mejorar, ¿pero es la única? No, para mí no, ni por asomo. 

Sin embargo, me gustaría ofrecerte una razón diferente para mejorar tu experiencia en la pesca con mosca, una de la que rara vez se habla en estos días, pero que creo que es igualmente válida. ¿Que tal convertirse en un buen lanzador para aumentar nuestro disfrute? Tómate unos minutos y observa a un buen lanzador de moscas. Lo que verás es a alguien en completo y total control de su medio. Sentirás la gracia, la elegancia y la belleza inherente a su suave línea que se desenrrolla en el aire. Un buen lanzamiento debe ser un motivo de disfrute personal, incluso de celebración, nunca algo que deba pasarse por alto o descartarse como un mero mecanismo por el cual lanzamos nuestra mosca a un objetivo. Después de todo, ¿no es el lanzamiento en sí mismo lo que diferencia la pesca con mosca de otras formas de pesca con caña? Si no podemos celebrar eso, ¿por qué pescar con sedal pesado? Hay otras técnicas o métodos de pesca más eficientes de capturar peces.
Así que no hay nada en la pesca con mosca como sentir los placeres táctiles que se obtienen con un buen lanzamiento, y todos deberíamos tener la oportunidad de experimentar esos placeres.

Claro que quiero engañar tantos peces como pueda, pero nunca minimizando o ignorando el proceso detrás de cada captura. Creo que cuando puedes mirar hacia el agua, elegir el lugar que te gustaría cubrir y luego lanzar tu mosca precisamente en ese lugar de la manera que deseas, bueno, eso es tremendamente gratificante. Recompensa de una manera que trasciende el mero hecho de traer otro pez a la red. Lo suficientemente gratificante como para que a mis años siga trabajando en mejorar mi propio lanzamiento. Y con suerte, lo suficientemente gratificante para que tu hagas lo mismo.

-Algo sobre el estilo de lanzamiento.

Durante mucho tiempo he creído que la palabra "estilo" se ha usado mal en referencia al lanzamiento de mosca. Con demasiada frecuencia, se invoca al "estilo" para describir lo que en realidad es una técnica defectuosa de lanzamiento. Es decir, se le atribuye una especie de "estilo" al lanzador como forma de explicar el aspecto de su lanzamiento, cuando lo que realmente explica el aspecto o golpe de lanzamiento, no es más que una mala técnica. A decir verdad, solo aquellos individuos que poseen una técnica de lanzado fundamentalmente sólida, se les debe asignar un "estilo".

Vamos a considerar como ejemplo a los golfistas profesionales para hacer una comparación. En general, todos los golfistas profesionales poseen una buena técnica (fundamentos sólidos), pero un examen detallado de sus golpes revela que no hay dos golfistas exactamente iguales. Todos tienen formas diferentes de lograr lo mismo. De hecho, tienen diferentes estilos. Para la mayoría de los golfistas aficionados, los errores en sus golpes no son manifestaciones de un estilo particular, son errores de técnica.

Lo mismo sucede en el lanzado de mosca. El noventa y ocho por ciento de nosotros tenemos fallos en nuestro golpe de lanzamiento. En consecuencia, en realidad no poseemos un "estilo", ya que nuestros lances se definen mejor por los errores que por los aciertos. Sin embargo, no hay nada de malo en esto, en absoluto. En realidad, es lo normal, es lo esperado. La mayoría de nosotros nunca hemos tomado lecciones de lanzamiento de mosca, y entre los que sí las han tomado, muchos han estado sujetos a enseñanzas cuestionables.

Te voy a dar un par de ejemplos de errores muy comunes en el lanzamiento de mosca que a menudo se atribuyen al "estilo" particular del lanzador. El primero es mover el codo paralelo al suelo durante un golpe de lanzamiento en un movimiento de empujar y tirar. Esto causa numerosos problemas, entre ellos bucles negativos traseros (una causa de los nudos de viento), y una trayectoria de la línea de mosca y el bajo de línea que es baja en el lance trasero (por debajo del plano horizontal), y relativamente alta en el lance delantero. 

Los lanzadores compensan este defecto inclinando la caña hacia un lado e incorporando un movimiento llamado "codo volador" o "ala de pollo" al final del golpe hacia adelante, una contorsión donde el codo se desplaza hacia arriba y fuera del cuerpo mientras el antebrazo pivota hacia abajo. Este movimiento, físicamente agotador para el brazo y el hombro, es necesario para evitar que la línea de mosca se golpee contra si misma o contra la caña cuando se usa este golpe de empujar y tirar.
Otro defecto muy común es flexionar la muñeca y también la caña en exceso, pero eso lo dejamos para otra ocasión.

Quizás te preguntes cómo es un golpe de lanzamiento que se podría calificar como fundamentalmente sólido. Mira este vídeo en YouTube.
Es un breve vídeo a cámara lenta que muestra el trazo de un campeón de lanzamiento de mosca. Mira como la caña, el antebrazo y la parte superior del brazo permanecen en un mismo plano durante todo el golpe. Su codo también se mueve hacia arriba en el lance trasero y hacia abajo en el lance delantero, nunca paralelo al suelo. Todas estas características vale la pena apropiarse de ellas.

Si me pidieran como decribir el estilo de este campeón, diría que es muy sólido, o sea, que es muy compacto, muy controlado y poderoso.

Tener algunos defectos de lanzamiento no significa necesariamente que nuestro tiempo en el agua sea menos agradable ni que capturemos menos peces. Hay que tener en cuenta que el lanzamiento, aunque importante, es solo una parte de la pesca con mosca y en muchos lugares ni siquiera es un factor crítico. Pero si creo que estamos mejor cuando reconocemos nuestras deficiencias y trabajamos para mejorarlas en lugar de esconderlas dentro del disfraz de "estilo". Y puedo asegurarte que mejorar tu lanzamiento contribuye en gran medida a mejorar tus capturas.
Así que reservemos la descripción de estilo para aquellos de entre nosotros que realmente lo merezcan.

-¿Como hacer lances cortos y precisos?

Una de las cosas más difíciles de conseguir en la pesca con mosca es lanzar cinco o seis metros la mosca con precisión. ¿Cinco metros? ¿Estoy bromeando? No, en absoluto, ni tampoco pretendo ser sarcástico. Simplemente estoy hablando de lanzar una mosca con precisión a cinco o seis metros de distancia de donde te encuentras a través de un bucle de línea apretado.

Inténtalo tú mismo. Si puedes lanzar seis metros o menos (incluyendo el bajo de línea) repetidamente, con precisión, con un bucle cerrado y en presencia de viento, felicidades. Se puede decir que dominas el arte del lanzado. De hecho, estás lanzando mejor que el 98% de todos los pescadores con mosca.

¿Que hace que los lances cortos sean tan difíciles? Varias causas, pero la principal es usar un golpe de lanzamiento demasido largo para la longitud de línea que se lanza. Para obtener la máxima eficiencia y eficacia, una longitud determinada requiere una carrera de lanzamiento de longitud determinada. Cuando la longitud cambia, o sea, cuando la longitud de la línea de mosca que tenemos en el aire cambia, también debe cambiar la longitud del trazo o brazada. Hay un principio simple con respecto a este concepto que todo pescador con mosca debe conocer: línea de mosca (en el aire) corta, golpe corto. Línea de mosca más larga, trazo más largo. Así es como funciona.

A= bucle estrecho, a= carrera de lanzamiento, trazo o brazada corta, golpe de lanzamiento corto. B= bucle ancho, b= brazada larga, golpe de lanzamiento largo.

Si encuentras que tu línea de mosca y tu bajo de línea giran en un bucle amplio (B) y se amontonan, tu golpe de lanzamiento es demasido largo (b). Acórtalo no llevando la caña tan atrás en el lance trasero. Continua acortando tu golpe hasta que tu línea de mosca y bajo de línea se encuentren formando bucles bonitos y apretados (A) que lleven tu mosca al objetivo. Por el contrario, si encuentras que tu línea y bajo chocan contra el agua antes de que se hayan desenredado por completo, alarga tu brazada.

Al final, el objetivo no es otro que encontrar la longitud de brazada correcta (que será ligeramente diferente para cada uno de nosotros, debido fundamentalmente a nuestras diferencias físicas) que entregue la mosca al objetivo con un bucle cerrado (A) girando al rededor de 40 centímetros por encima del agua. De esta forma, podemos conseguir una gran precisión y hacer poco menos que irrelevante la mayor parte del viento.

Con mucho viento, es posible que también tengas que acelerar tu brazada para enderezar tu bajo de línea. Sin embargo, el aumento de la velocidad del golpe de lanzamiento debe hacerse junto con la longitud adecuada de la brazada.

Lanzar seis metros o menos, debería ser una de las tareas más sencillas en la pesca con sedal pesado, pero para la mayoría de los pescadores con mosca sigue siendo una de las más difíciles. Para hacerlos simples estos lances en corto, recuerda emplear el golpe de lanzamiento en su longitud correcta. Para casi todos nosotros, eso significa acortar nuestro golpe trasero.

7. Caña y velocidad de línea

Hace un par de temporadas, mientras lanzaba mi mosca bajo las ramas de una salguera, un conocido pescador se acercó a mí para preguntarme con que caña estaba pescando. Le respondí que con una caña de más de treinta años. Le invité a probarla curioso de lo que pensaría de ella. Después de hacer varios lances me dijo que era una caña muy ligera pero algo lenta para su gusto. Muy emocionado, me habló de su nueva caña y la alta velocidad de línea que conseguia con ella. Naturalmente, me dejó probarla y después de hacer algunos lances con ella, le dije que desafortunadamente la alta velocidad de línea era todo lo que se podía hacer con su flamante caña. Me devolvió una mirada burlona, una mirada que dibujaba en su rostro una explicación más detallada por mi parte.

Durante muchos años, la alta velocidad de línea de mosca se ha tenído en alta estima. Algo así como el Santo Crial para aquellos especialistas que evalúan cañas de mosca. Las cañas que se consideran que producen una velocidad de línea alta, son muy estimadas por el gran publico. Por contra, las cañas que no, se consideran de calidad inferior. Sin embargo, en la mayoría de las situaciones de pesca, particularmente cuando se trata de pescar truchas, no necesitamos una línea de alta velocidad. De hecho, en realidad puede ser una desventaja, incluso peligrosa. Y sinó, piensa en lanzar una cabeza dorada zumbando de un lado a otro junto a tu cabeza a gran velocidad.

Idealmente, una caña de mosca debería permitirnos lanzar nuestra mosca a su objetivo utilizando la velocidad de línea más baja posible, acorde con las necesidades del momento. En realidad, es una simple cuestión de eficiencia. Emplear una velocidad de línea superior a la necesaria es un desperdicio, ya que requiere más trabajo por parte del lanzador. Algo así como circular en bicicleta con los frenos puestos. Puedes hacerlo, pero requiere más esfuerzo, y además no es nada divertido.

Un hecho cierto sobre la mayoría de las cañas contemporáneas es que no pueden lanzarse con otra cosa que no sea con una línea de alta velocidad. Quizás te preguntes ¿como es eso? Bueno, considera como funciona una caña de mosca. Cuando una caña de mosca se dobla, almacena energía (energía potencial), igual que el agua embalsada de un pantano almacena energía potencial. Cuando la caña se endereza, esa energía es liberada al lance, lo que ayuda a impulsar la línea de mosca. El agua almacenada en un pantano cuando es libera se combierte en energía cinegética que se apovecha para mover una turbina y producir eléctricidad.

Cuanto más resistente es una caña a la flexión, es decir, cuanto más rígida sea, más trabajo se requiere para forzarla a doblarse para almacenar la energía necesaria. Más trabajo significa más aceleración del brazo y la mano del lanzador. La consecuencia de esta aceleración es una mayor velocidad de línea. De hecho, lanzar una caña rígida requiere un golpe de lanzamiento más rápido y enérgico.
Una caña demasido rígida era exactamente lo que mi amigo tenía en las manos. Estaba lanzando cuando exclamó sobre cuanta velocidad de línea estaba logrando. En verdad tenía una velocidad de línea alta esa caña, pero era lo únio que tenía.

Creo que el lanzamiento con mosca debe ser una experiencia placentera y gratificante. Si se hace particularmente bien, es una actividad agraciada y elegante, incluso cuando se lanza ninfas pesadas.
Ignorar o minimizar estos valores estéticos plantea la siguiente pregunta: ¿por qué pescar con mosca? Para ello, una caña bien diseñada ofrece grandes recompensas estéticas. Un sello distintivo de una caña de este tipo es que permite el uso de cualquier velocidad de línea que el lanzador considere apropiada: alta, baja, intermedia. Una buena caña nunca dicta la velocidad de la línea con la que debe lanzarse una mosca, simplemente responde a los deseos y necesidades del lanzador.

La baja velocidad de la línea como es el caso de mi vieja caña de mosca, requiere poco esfuerzo físico y, para la mayoría de nosotros brinda el máximo placer de lanzamiento. Pero hay otras razones para lanzar con una caña de acción lenta maś allá de la estética y el esfuerzo. Una línea de movimiento lento es más fácil de controlar y la precisión milimétrica es más fácil de lograr.
Si, es cierto, hay momentos en los que es necesario una línea de alta velocidad, piensa en lanzar grandes distancias o lidiar con un fuerte viento, pero en la mayoría de la pesca de la trucha, esas son circunstancias inusuales.

Mi vieja caña. Marca SAGE, LL 8,6, #4. Serie Graphite III, 1988.

Me siento afortunado de tener esta vieja caña SAGE que me permite lanzar comodamente una y otra vez con precisión absoluta a cualquier velocidad de línea que elija y a cualquier distancia razonable. Son cañas antiguas que datan de finales de los 70 y de los años 80. Cañas que se doblan fácilmente bajo el peso de línea apropiado.
Este tipo de cañas es muy difícil de conseguir, pero últimamente algunos fabricantes han comenzado a incluirlas en sus catálogos, (ojo! La nueva caña LL de SAGE no se parece en nada a la vieja), esa sin duda es una buena noticia, ya que ofrecerá a muchos pescadores la oportunidad de experimentar por primera vez el control de velocidad de su propia línea.

-Una observación más sobre las cañas de mosca

Hay una tendencia decidida en los últimos años hacia las cañas que son más rígidas y de acción más rápida que las del pasado. En gran medida, esto es algo bueno, pués las cañas antiguas de más de vente o treinta años solían ser demasido lentas y blandas. Pero como suele suceder en estos casos, se ha desviado demasido en la dirección opuesta. Con la llegada de las cañas más rígidas, las líneas de mosca han tenído que aumentar el peso.

La mayoría de las cañas que se fabrican hoy en día son por lo general demasiado rígidas para el uso previsto que se las va a dar, lo que tiene como resultado una serie de consecuencias perjudiciales. Quizás lo más significativo sea la falta de sensación al lanzar distancias medias y cortas y el exceso de esfuerzo físico que se necesita para que estas cañas funcionen a esas distancias debido a que se niegan a doblarse.

En un intento por compensar este desarrollo, los fabricantes de línes de mosca, han aumentado el peso de sus líneas. En esencia, tomando líneas de peso 5 y renombrándolas como de peso 4, o tomando una línea de peso 6 y llamándola de peso 5, y así sucesivamente.

La gran ironía es que estos desarrollos no representan nada nuevo. Esto ya fué descrito en los años cincuenta por John Atherton en su libro The fish and the fly, "El pez y la mosca" 1951.
Si, setenta años después, nos encontramos una vez más pisando terreno trillado.

Se ha dicho que la historia se repite. Con respecto a la pesca con mosca, no hay duda de que lo hace, y eso no siempre es algo bueno. 

8. Improvisar o adaptarse

A medida que cambio de río o de tramo de un mismo río, también cambio de estrategia, no sólo para acercarme a los peces y presentarles la mosca adecuada, sino también de aparejos y técnica de pesca. Adaptarse de una temporada a otra, de una semana a otra, de un día para otro, incluso de un tramo a otro del mismo río es la clave. Cambiar y adaptarse a las condiciones es una de las variables más importantes para el éxito en la pesca con mosca.

9. En la pesca con mosca no hay soluciones mágicas. ¿Importa la mosca?

Una mejor caña no te convertirá en mejor lanzador ni en un mejor pescador, aunque puede ayudar mucho al que comienza a dar sus primeros pasos en el mundo de la pesca con mosca. La elección de una caña en particular, un carrete de última generación o unas buenas botas de vadear, no te convertirán en un mejor pescador, ni tu éxito aumentará pescando un determinado río o una determinada eclosión, o usando una mosca secreta. En una palabra, no hay soluciones mágicas.
Aparentemente nos han querido lavar el cerebro para creer que solamente tirando de billetera, nuestro nuevo equipo compensará con creces nuestra falta de experiencia y habilidad. Muchos pescadores piensan que van a lanzar mejor con su increíble nueva caña. Que clavarán más peces con ese nuevo patrón de mosca.
Es un hecho que algunas cañas lanzan mejor que otras,  que algunas son más apropiadas para nuestro estilo de pesca y para nuestros ríos favoritos, que incluso algunas buenas cañas pueden ayudarnos a progresar como lanzadores. Que algunos carretes tienen sistemas más efectivos que otros. Que algunas moscas superan en efectividad a otras. Seamos francos, todos queremos pescar con equipos y aparejos que nos den un mínimo de ventaja y, honestamente, no veo nada de malo en eso. Sin embargo, lo que no siempre parece que se comprende es que la balanza en la pesca con mosca se inclina invariablemente hacia la habilidad y la experiencia del pescador, y se aleja de las soluciones mágicas.

¿Importa la mosca "secreta"? A veces si, pero hacer una presentación sólida con una adecuada deriva es mucho más importante que la mosca. No hay moscas mágicas amigo pescador, o dicho de otro modo, no hay moscas que desprendan tanta mágia como para suplir un mal lanzamiento o una mala técnica. Ninguna mosca conocida tendrá más importancia que una buena presentación.

¿Impota el patrón de mosca? Hay ciertas creencias inherentes al deporte de la pesca con mosca, y una de las más arraigadas dice que el patrón de mosca es importante. Importante en términos de éxito, osea de capturas. Creemos que nuestra elección de la mosca es responsable de los peces que capturamos, y que si encontramos la mosca adecuada, nuestro éxito no tendrá límites. Pero, ¿realmente funciona de esa manera? ¿Es nuestra elección del patrón tan crítico? Buena pregunta.

Para que el patrón de mosca importe, para que sea el único factor detrás de nuestro éxito, primero debe convertirse en el factor "limitánte" o "determinante". Con eso quiero decir que hay que tener en cuenta todas las demás variables. Por ejemplo, imagínate que estamos pescando en una tabla del Esla una eclosión de Baetis rhodani. Para que nuestra mosca importe tiene que pasar varias cosas. Nuestro acercamiento al pez debe pasar desapercibido. Nuestro lance tiene que ser preciso y oportuno. La mosca debe derivar libre de arrastre (a menos que sea intencional). En resumen, tienes que hacerlo todo bién, sólo entonces podemos atribuir el éxito o el fracaso directamente al patrón de mosca.

Si alguna de estas variables no se tienen en cuenta, simplemente no podemos decir que nuestra mosca está marcando la diferencia. Bueno, podemos decirlo, pero estaríamos equivocados. Y aquí radica el problema. Muy, muy pocos pescadores poseen las habilidades necesarias para hacer que la mosca sea el factor "limitante". Si tienes esas habilidades regularmente, entonces felicidades, perteneces por derecho propio a un círculo sólo reservado para los maestros de este deporte. La mayoría de nosotros no hemos alcanzado ese nivel, lo que significa que algún aspecto de nuestra pesca con mosca, generalmente la presentación, está comprometiendo nuestro éxito.

¿Estoy sugiriendo entonces que simplemente pesquemos con cualquier mosca que queramos? Por supuesto que no. Si bien es posible que la mayoría de nosotros no tengamos  las habilidades necesarias para hacer que la mosca sea todo el tiempo el factor "limitante", las moscas de los pescadores promedio como yo, seguirán actuando algunas veces como factor "limitante". Ante esto, creo que una estrategia adecuada es utilizar un patrón de mosca que se adapte a la situación en la que te encuentres y luego no preocuparte demasido por ello.

Esto no significa que no haya diferencias entre las moscas. Hay muchas razones para elegir un patrón sobre otro, pero sólo desde el punto de vista del pescador, como por ejemplo: pescar con una imitación de rhodani en paracaidas que plaque bien, que sea facílmente visible y duradera, o una imitación de subimago de "pardón" que derive alto, con un collar de flotación montado con pluma de cuello de gallo, etc.

Al final, es seguro decir que el patrón de una determinada mosca puede importar, pero no tan amenudo como pensamos. Mi consejo es que encuentres patrones que se adapten a tu forma de pescar y a los ríos que frecuentas, ya sean patrones de emergentes, subimagos, imagos muertos, etc. Y pesca con sumo cuidado. Haz que tus presentaciónes cuenten. Eso es algo que realmente importa.
Los mejores pescadores casi siempre tienen una base sólida de habilidad y experiencia. Eso demuestra que para ser efectivos en la pesca con mosca, tenemos que dedicar el tiempo suficiente para conocer y desarrollar nuestras habilidades.

La tabaco. Montaje en paracaidas

Montaje de un tricóptero en paracaidas

La "aceituna". Montaje en paracaidas

"La abrileña". Montaje en paracaidas

-Algo sobre las emergentes.

Las emergentes son una de mis moscas preferidas para pescar truchas en nuestros ríos leoneses. Lo más probable es que esto se deba a que, en muchas ocasiones, me han rescatado de una racha aparentemente interminable de intentos fallídos por dar con la mosca adecuada, y a veces también de un estrepitoso fracaso. Tal vez durante estas ocasiones, fue que no pude discernir correctamente que insecto estaban tomando las truchas y como los tomaban, sino que seleccioné la imitación incorrecta.

Las emergentes bien pueden ser el tipo de fuente de alimento más fácil de capturar para una trucha, ya que permanecen prácticamente atrapados en la película superficial del agua, a menudo durante largos periodos de tiempo. Como tal, cuando los subimagos derivan por la superficie del agua, en ocasiones son ignorados por las truchas oportunistas que optan por la comida más fácil, osea por las emergentes atrapadas en el menisco.

Tal vez mis intentos por seleccionar la mosca correcta habían fallado porque, en primer lugar, las truchas  no estaban tomando subimagos como yo pensaba, sino emergentes. En cualquier caso, el hecho es que las emergentes son uno de los tipos de moscas más efectivos, y muchos pescadores no las utilizan devidamente.

-Las siguientes reflexiones son sobre por qué deberías pescar con emergentes, cuándo y dónde.

Cada insecto que emerge a través de la película superficial del agua y que muchos pescadores intentan imitar con sus particulares patrones de moscas secas, primero pasó un tiempo como emergente. Ese insecto generalmente pasó mucho más tiempo en las etapas de emergencia que serían imitados por un patrón de emergente que en aquellas que serían mejor imitados por un subimago flotando bien alto.
Hay una buena razón por la que los montajes en paracaidas son uno de los montajes más populares de todos los tiempos: representan con mayor precisión a una efímera que se acerca a la etapa final de su emergencia que a un subimago que deriva alto sobre la superficie del agua con las alas ergidas.

Es importante entender la dinámica que juega la tensión superficial del agua con respecto a los insectos emergentes. La tensión superficial del agua es lo que crea la capa de "película" que es tan importante para los peces como para los pescadores. La tensión superficial del agua es un gran obtáculo para los insectos emergentes, especialmente para los más pequeños, un hecho que a menudo los pescadores malinterpretan. Esta capa es una sustancia membranosa espesa y plástica en la que los insectos emergentes luchan mucho para sobrepasarla y salir a la superficie o directamente volar fuera del agua hacia las orillas del río. Esta es precisamente la razón por la que los insectos emergentes son tan susceptibles a las truchas.

A medida que baja la temperatura del agua, aumenta la tensión superficial y el resultado es una barrera casi infranqueable para muchos pequeños insectos acuáticos que intentan emerger a la superficie. Además, la temperatura del agua no es la única temperatura relevante para que aumente la tensión superficial, la temperatura ambiente también juega un papel importante. A medida que aumenta la temperatura del aire, la dinámica de la interacción entre la superficie del agua y el aire, (un factor crucial para determinar la tensión superficial), cambia, y la temperatura ambiente más cálida también produce una "película" más delgada.

Si bien estos efectos pueden o no ser pronunciados, es probable que sea seguro asumir que los insectos que emergen en aguas más frías o en días más fríos, lo tienen más difícil, y por lo tanto pasan más tiempo luchando justo debajo de la superficie del agua, que aquellos que emergen en condiciones más cálidas.

El flujo y la estructura de la corrientes, (tablas, rápidos, remansos, rabiones, etc.) también juegan un papel importante en lo que respecta a la tensión superficial del agua. Esencialmente, el agua rápida y turbulenta es amiga de los insectos emergentes. El tedioso trabajo de romper la película superfial se ve favorecido por el agua rota, ya que los rápidos y similares rompen la película superficial y dan a los insectos la oportunidad de emerger más fácilmente.

Emergente "carne", (ignita)

Emergente universal

"La negrisca". Montaje emergente

Aunque he tenído grandes pescatas con emergentes y moscas ahogadas en corrientes rápidas, estos sin embargo, generalmente no son los lugares de alta concentración de emergentes. Por contra, en aguas lentas y tranquilas como las grandes tabladas de nuestros ríos regulados, la película superficial es más pronunciada y es casi seguro que encontrarás más emergentes y más peces en esta parte del río. Más sobre emergentes y sus montajes en este enlace: https://navatejeramoscas.blogspot.com/2014/11/emergente-de-betidos.html  

La única manera de mejorar y llegar a ser un buen pescador con mosca es dedicar más tiempo y energías a la pesca, pero sin obsesionarse demasiado luchando por conseguir un nivel de excelencia que en la mayoría de los casos solo genera ansiedad en lugar de satisfacción. No es necesario convertirse en un pescador que se pasa horas y horas en el río para encontrar la pesca satisfactoria. Cualquier otra cosa es pura fantasía.

10. Elimina todos los falsos lances innecesarios

El falso lance es una perdida de tiempo. No puedes pescar peces si tu mosca no está en el agua. << ... "No hay peces voladores en Montana, ni en Pensilvania ni en ninguna parte">>, dice Paul a su hermano Norman (El río de la vida).
Una de las razones por las que Paul pescaba más peces que su hermano era porque tenía sus moscas más tiempo en el agua que él. "Hermano", decía, "no hay peces que vuelen en Montana. Aquí no se puede pescar peces con la mosca en el aire". Y, sin embargo, a los pescadores con mosca les encanta hacer falsos lances todo el tiempo. Me atrevería a decir que la mayoría de los pescadores con mosca pasan más tiempo preparado la mosca para la siguiente deriva que la propia deriva de la mosca sobre el agua, exactamente lo que dice Paul.
Los pescadores más efectivos son los más eficientes. Así que pasan el doble de tiempo o más con su mosca en el agua que en el aire. Inevitablemente estos pescadores pescan más peces.

11. Un acercamiento descuidado al pez es el error más importante que debes evitar

Puedes ser el mejor lanzador del mundo, haciendo excelentes presentaciones con la mosca perfecta, pero si ya has asustado a los peces, ¿de qué te sirven tus habilidades? Es imperativo recordar que los peces que perseguimos son animales muy cautelosos y no quieren saber nada de nosotros. Si respetas ese carácter de las truchas mediante un acercamiento cauteloso y estudiado previamente, te estarás dando una oportunidad para engañarlas.

Una de las grandes diferencias que veo entre los pescadores con experiencia y los aficionados, y aquí uso "aficionados" en el mejor sentido de la palabra, es en sus respectivos planteamientos y la entrada al agua en la que están a punto de pescar. Los expertos siempre hacen un acercamiento cauteloso y un examen cuidadoso del entorno. Están buscando peces, los que están visibles o subiendo. Si la visibilidad es limitada, las aguas poco profundas se prueban con una serie de lanzamientos antes de entrar en aguas más profundas. Los pescadores expertos utilizan este enfoque en ríos y arroyos pequeños, en ríos regulados más grandes, en lagos, y en todo tipo de aguas que pescan. Los pescadores "aficionados" normalmente no hacen esto. Casi siempre vadean de inmediato en busca de aguas más profundas, pasando por alto las aguas menos profundas.

Sin embargo, lo curioso es que a menudo, las truchas grandes quieren descansar y alimentarse en aguas poco profundas, aprendiendo a confiar en sus instintos de supervivencia y a camuflarse para evitar la depredación. No albergan reparos en absoluto al respecto. La exposición que arriesgan en aguas poco profundas vale la pena y es por una buena causa, porque las presas son fáciles de atrapar en estas áreas del río poco profundas. Toda la comida se comprime en una franja corta, por lo que tomarla sobre o debajo de la superficie del agua requiere gastar pocas energias, o sea, requiere poco movimiento y esfuerzo por parte de los peces.

A veces es dificil entender por qué las truchas eligen ciertos lugares que parecen no ofrecer protección. Algunas veces, he visto peces grandes aleteando perezosamente en vente centímetros de agua sobre un fondo de guijarros o arenoso. Estos son los peces que los pescadores impacientes a menudo nunca ven. Mi consejo es que te acerques con cuidado al río y mires lo que tienes delante antes de entrar al agua, y si no ves peces en aguas poco profundas, al menos haz algunos lanzamientos antes de empezar a vadear en busca de aguas más profundas. La recompensa puede ser grande, aveces muy grande.

12. No te enojes cuando algo sale mal

Es natural enojarse cuando algo sale mal o cuando las cosas no salen como uno espera que salgan. En mi juventud rompí varios puntales por esta causa. La pesca con mosca no competitiva de lo que se trata es de divertirse. Si te enojas cuando estás en el agua, tu rendimiento físico se deteriorará al tiempo que tu mente y tu concentración se oscurecerán. No debes preocuparte cuando algo te salga mal o el día se tuerza, solo recuerda que estás ahí para divertirte. Así que procura concentrarte solo en las cosas positivas.

13. Tómate un tiempo antes de entrar al agua, aprende a observar y a seleccionar la mosca adecuada

Uno de los aspectos más valiosos pero menos practicados de la pesca con mosca es la observación. Observación como simplemente estudiar durante unos minutos el agua en la que estás a punto de pescar para ver que está pasando.
Es sorprendente el éxito que se obtiene con este enfoque básico. Pero casi nunca veo a los pescadores en otro río que no sea El Cea pasar ni un breve momento mirando el agua antes de meterse y comenzar a lanzar. Quién sabe, tal vez los pescadores de nueva hornada sean simplemente proféticos.

 El tiempo más importante antes de entrar al agua se suele dedicar a observar, no a pescar. Es un error muy común;  llegamos a nuestro destino de pesca emocionados y lo más probable es que cuando nos precipitemos hacia el agua estemos asustando a los peces que ni siquiera hemos visto... y estos peces asustados transmiten su nerviosismo a los demás peces. Mi recomendación es que cuando llegues al río, te tomes un tiempo antes de entrar al agua, examina cuidadosamente toda la escena que tienes a tu alcance: la velocidad y claridad del agua, la temperatura, la profundidad, la estructura, etc. Observa las ramas aledañas, las telarañas y los pastos colindantes, a menudo verás insectos atrapados en estas estructuras que te pueden ayudar a tomar una decisión en cuanto a que mosca presentar a los peces. Mira los cielos, la temperatura ambiente, cualquier viento o nubosidad que te pueda indicar que tiempo hará el resto del día. Cosas de esta naturaleza te ayudarán a predecir lo que pueden hacer los insectos en las próximas horas y lo que han hecho en las horas anteriores, así como el comportamiento de las truchas.

Todo eso te puede parecer mucho, pero con cinco minutos relajantes de observación, quedarás impresionado de cuanto se puede asimilar en tan corto espacio de tiempo. Te impresionará aún más lo consciente que estarás de todos estos elementos a lo largo del día. Ah! Y otra cosa, tómate algún descanso y, si tienes prisa o te vuelves impaciente, recuerda esto: "solo necesitas un lanzamiento para capturar un pez". Es decir, no hay prisa cuando se trata de pesca recreativa. Es calidad frente a cantidad.

Resumiendo, no hay dos días ni dos horas ni dos escenarios iguales en un río. Tómate un tiempo extra cuando lleges al tramo por primera vez y estarás en el camino correcto de aprender a dominar la observación y la selección de la mosca, pero no olvides que no hay nada peor que saber lo que comen los peces y no tener la imitación adecuada en la caja.

14. Lances largos

Tengo la impresión de que cuando entramos al agua parece como que nos sintiéramos obligados a lanzar la mosca lo más lejos posible para alcanzar esas posturas jugosas y asustar todo lo que se interpone entre nosotros y nuestro mejor lance. Mi consejo es que al realizar la primera prospección, comiences a pescar cerca de ti, luego reubícate y repite.

15. Lanzando incansablemente sobre el mismo pez

En mi experiencia personal, la primera presentación de la mosca a una trucha que se está cebando es la más importante, incluso si la presentación no ha sido buena. Una segunda presentación tiene la mitad de posibilidades de éxito, y una tercera la mitad de la mitad. Si tienes los ojos puestos en un pez en ascenso, vale la pena tomarse unos minutos antes de lanzar la mosca para estudiar la situación; verificar el bajo de línea y el tippet terminal por si hubiera algún nudo de viento. Identificar en lo posible que come el pez y donde, si se está alimentando de emergentes o de algún insecto que deriva sobre la superficie del agua, incluso verificar el intervalo entre una subida y la siguiente. En fín, se me ocurren algunas cosas más, pero el tiempo en estas situaciones apremia y no podemos permanecer mucho tiempo examinando la situación.

No te des por vencido demasiado pronto si los peces no responden rápidamente a una eclosión. Las truchas pueden tardar una eternidad en tomar el primer insecto que emerja o derive por la superficie. Incluso entonces, con frecuencia da la impresión de que las cuesta subir a tomar el insecto. Esta peculiaridad de la alimentación de nuestras truchas también significa que es importante no emitir un juicio demasido rápido sobre que mosca usar y como presentarla. 
El hecho de que un pez que se está cebando en superficie no tome tu mosca a la primera, segunda o tercera presentación, no significa necesariamente que algo estés haciendo mal. Tu mosca puede ser la correcta y la presentación perfecta. No importa, a veces las truchas reaccionan a la comida según sus propios caprichos y fantasias, independientemente de la abundancia de insectos en el agua.

Las truchas tampoco capturan todos los insectos naturales que flotan sobre ellas. Por lo tanto, a menudo se necesita una buena cantidad de lanzamientos antes de que el momento de la deriva coincida con la subida de la trucha. Entonces, el éxito, al menos para mí, generalmente depende de averiguar el ritmo de subida del pez. A menudo las truchas, especialmente las más grandes, suben varias veces seguidas para luego descender por un tiempo hasta la próxima subida. Observar cuantas subidas se producen en cada sesión de alimentación y el intervalo entre las subidas te ayudará a planificar mejor tu lanzamiento.

Sé que este tipo de planificación no es para todos, pero si te atrae la pesca con mosca en superficie o ligeramente por debajo, prestar atención al comportamiento de los peces cuando se alimentan es fundamental, es más que una interesante observación secundaria, a veces es esencial para hacernos con el pez que se está cebando. 

16. Reducir la velocidad

Hay un viejo dicho que los pescadores con mosca deben recordar cada vez que están en el agua, "la velocidad no es buena en la pesca". En otras palabras, mira más y camina o vadea menos. Adapta tu ritmo a la pesca en lugar de mantener el mismo ritmo frenético que empleas en tu vida cotidiana. No sólo disfrutarás más, que no olvides es el verdadero propósito de nuestro tiempo en el agua, sino que también es probable que pesques más. 
Personalmente, necesito recordarme constantemente a mi mismo (aunque cada vez menos), que en general debo reducir la velocidad cuando estoy en el agua. Cuanto más lento y metódico soy, más me concentro en lo que hago, y esto realmente parece ayudar a mi estrategia de pesca y a pescar más peces. ¡Ah! Y recuerda que el bastón de vadeo no es un bastón de un anciano, es la herramienta perfecta de un pescador sabio. La pesca con mosca no es un deporte para personas estáticas. Nada es más importante que un vadeo seguro.

Para finalizar 

Muy pocos de nosotros tendremos la oportunidad de sentarnos en una mesa con los pescadores más talentosos del mundo. Lo más probable es que ni siquiera lleguemos a encontrarnos con alguno de ellos en el río, (aunque dudo si alguno sería capaz de aclararme como y por qué se forman los nudos de viento y como evitarlos). Sin embargo, ahora tienes la ocasión de aprovechar muchos años de mi experiencia personal plasmados en estas cortas pero interesantes reflexiones. Espero que valga la pena.

Buena pesca.