Bétidos del Esla. La pesca que me gusta.

Han pasado más de treinta años desde que Rafael del Pozo publicara en 1987 su libro "Moscas para la pesca". Desde entonces, muchas cosas han cambiado y si tuviera que publicar hoy un nuevo libro, su lista de insectos acuáticos y su importancia para la pesca sería bastante diferente. 

Sin embargo, no es ningún secreto que el río Esla en su curso medio siga siendo uno de los ríos más ricos en insectos acuáticos del mundo y uno de los mejores ríos trucheros de España. Tiene un gran número de peces de tamaño considerable, aunque su pesca se vuelva con frecuencia difícil por las variaciones de caudal durante la temporada de riegos y la baja temperatura del agua.

Aun cuando el carácter del Esla sea a veces enrevesado y bravucón, su curso llano y elevado, con innumerables tablas de aguas someras y raseras poco profundas, se presta perfectamente para la pesca con mosca seca.

Baetis rhodani, Efemera "Aceituna".

Casi todas las principales eclosiones de insectos acuáticos y terrestres siguen estando presentes en este río, ya se trate de tricópteros, plecópteros, efemerópteros, dípteros o himenópteros. El Esla tiene múltiples familias de cada uno de estos órdenes de insectos que brindan al pescador deliciosas oportunidades de pesca estacionales como por ejemplo los "Pardones" de principios de temporada (Rhithrógena germánica), que las truchas los prefieren a cualquier otro insecto que esté eclosionando al mismo tiempo, o la Dinocras cephalotes, "la mosca de la piedra" que se la puede ver ya en el mes de abril.

Los Bétidos, aunque no se encuentren entre las moscas más grandes del río, son uno de los insectos acuáticos más importantes en la dieta de las truchas a lo largo de toda la temporada. 
Varias especies de Bétidos emergen en el Esla desde marzo hasta noviembre, aunque durante el verano las eclosiones de algunos de ellos se producen con cierta irregularidad, volviendo a eclosionar con más o menos intensidad durante los meses de septiembre y octubre. 

Entre estos periodos, el mejor con diferencia son los meses de septiembre y octubre. Como beneficio adicional, este es un periodo en el que las truchas necesitan alimentarse para reponer fuerzas de cara al invierno, además hay menos pescadores en el río y las truchas están más tranquilas.

Baetis rhodani, Efemera "Aceituna"

La familia de los Bétidos está representada en el río Esla por varias especies como la Baetis niger la "Negrisca", fácil de identificar por su coloración oscura. LBaetis fuscatus, con sus grandes y llamativos ojos de color amarillo limón en los machos. La Baetis buceratus, que eclosiona en los meses de verano hasta final de temporada. La Baetis atrebatinus, una especie muy abundante en el Esla durante los meses de verano. La Baetis muticus, que eclosiona en mayo y junio, y después vuelve a eclosionar en septiembre y octubre. La Baetis scambus, posiblemente la especie más pequeña de toda la familia de los Bétidos, se la puede ver en el Esla a partir de mayo hasta agosto. La Cloeon dipterum que, aunque pertenece a otro género diferente como su hermana la Cloeon simile, sin embargo, las dos forman parte de la misma familia de los Bétidos. La Centroptilum luteolum, otro precioso Bétido de color amarillo en los subimagos, antaño muy abundante en el Esla, como lo era también la "flor del Río" (Potamanthus luteos), que cuando eclosionaban formaban auténticos jardines flotántes derivando por la corriente como pétalos de flores, hoy prácticamente desaparecidas las dos especies.

Pero sin duda, la más representativa de todos los Bétidos del Esla es la Baetis Rhodani, más conocida por la Efemera "Aceituna", la más precoz de las especies de este género. Estos insectos son particularmente interesantes porque tienen un tamaño 16-18 al principio de temporada, un tamaño 20 durante el verano, y un tamaño más pequeño del 22 al 24 en septiembre y octubre, (muchas especies de Bétidos tienen múltiples generaciones por año).

La primera visualización de la Baetis rhodani flotando río abajo secándose las alas es conmovedor para el pescador con mosca, ya que indica que la primavera ha llegado o está cerca, y a demás, tiene toda la temporada por delante para disfrutar de los peces, de los ríos, de la naturaleza, de las altas montañas y de los verdes prados, y por supuesto, de sus compañeros de pesca.

La Baetis rhodani comienza a eclosionar durante el mes de marzo. Sin embargo, después de un invierno templado se suele ver ya en febrero, mientras que, después de un invierno tardío severo, puede ser el mes de abril cuando comiencen a verse en cantidades significativas.

Tarde o temprano, su aparición junto con los "pardones" es un espectáculo bienvenido, porque brinda la oportunidad de comenzar a pescar truchas a mosca seca, especialmente después de pasar los primeros días de la temporada pescando a ninfa.

Septiembre y octubre, dos meses mágicos para la mosca seca.

A medida que las hojas cambian de color y comienzan las mañanas heladas, la pesca con mosca seca puede ser excelente ya que las truchas en esta época del año se elevan con entusiasmo hacia los patrones modernos y tradicionales. Los tamaños pequeños suelen ser los mejores, digamos del 18 al 24.

En condiciones menos favorables, una técnica alternativa como la pesca en tándem seca-ninfa puede ser la mejor opción. También en esos días ásperos con poca actividad de los peces que hacen que la mosca seca y el tándem seca-ninfa no sean practicos, es bueno volver a un aparejo de dos moscas, una ahogada para pescar a medias aguas en tándem con una ninfa de punta que, aunque ahora este aparejo está pasado de moda, sigue siendo efectivo cuando se pesca a lo largo y ancho de las corrientes de un río como el Esla.

Por otra parte, comprender la naturaleza de un río y conocerlo en profundidad suele ser la clave para un día de pesca exitoso y, en ese sentido, el Esla no es diferente a cualquier otro río. En otras palabras, es la ecología del río, la vida de los insectos y cómo los peces se comportan ante las diferentes eclosiones y los cambios climáticos o los diferentes flujos del río.

La Baetis rhodani

La Baetis rhodani emerge en septiembre y octubre prácticamente a diario y a veces en números prodigiosos, y dado que hay poca actividad de otros insectos en esta época, las truchas prestan aún más atención a estas diminutas efímeras de lo que lo harían de otra manera.

Aunque se trata de una misma especie, las diferentes generaciones de este insecto acuático varían de tamaño en función del tiempo que sus ninfas (tipo nadador) pasan madurando en el fondo del río.
Puede parecer extraño que insectos tan pequeños puedan ser tan importantes en la alimentación de las truchas en un río más o menos grande como el Esla, pero lo son.

Las truchas se congregan en las zonas más lentas y tranquilas del río casi todas las tardes de septiembre y octubre para sorber ninfas en ascenso o atrapar subimagos en superficie de este Bétido. Estos pequeños insectos acuáticos deven ser muy sabrosos porque a menudo las truchas prefieren alimentarse de estas diminutas moscas mientras ignoran las más grandes que pasan por su carril de alimentación.

No todos los insectos acuáticos de otoño son pequeños. En el río Esla por ejemplo, se pueden ver efímeras de tamaños considerables en septiembre y octubre.

Efímera de tamaño #12. Quintana de Rueda, río Esla, octubre 2020.

Para los aficionados a la pesca a trucha vista o trucha cebada, esta es una oportunidad inigualable para pescar con diminutas moscas secas y emergentes.

Aunque la Baetis rhodani emerge regularmente a lo largo de los primeros y últimos meses de la temporada, ciertos días experimentan eclosiones más copiosas que otros. El clima desapacible parece ser el factor desencadenante de este fenómeno. Sin embargo, al contrario de lo que muchos piensan, buenas eclosiones pueden ocurrir en cualquier condición climática, pero es verdad que las mejores eclosiones siempre tienen lugar bajo cielos encapotados. Si a estos cielos grises les acompaña algo de lluvia, casi seguro que tendremos garantizado varias horas de diversión.

Salvo excepciones, a partir del mediodía, entre las doce y las cuatro de la tarde, es cuando se produce la mayor actividad de las truchas en estos dos últimos meses de la temporada de pesca. Hay que tener encuenta que en esta época del año los días son más cortos, hay menos horas de luz y las temperaturas son más bajas. 

A principios de temporada, las eclosiones de la "aceituna" suelen producirse algo más tarde, al rededor de las dos o las tres de la tarde, incluso más tarde y salvo excepciones, suelen durar poco tiempo. Por lo tanto, para el purista de la mosca seca, no es necesario madrugar mucho.

En los días cálidos y ventosos, los subimagos de la B. rhodani abandonan rápidamente el agua porque las condiciones ambientales secan sus alas casi al instante. En estas situaciones, a menudo las truchas se concentran más en capturar las ninfas emergentes que a los pocos subimagos que derivan por la corriente.

Las ninfas de la Baetis rhodani tiene forma de torpedo. El cuerpo es de color oliva oscuro segmentado de amarillo pálido y saco alar más oscuro, que se vuelve casi negro cuando están listas para eclosionar. Una ninfa de "Cola de faisán"  o un perdigón tamaño #16 son probablemente las mejores imitaciones de esta ninfa. Más sobre los "Perdigones" aquí .

Para aguas rápidas y corrientes más o menos profundas, la mejor opción es montar la "Cola de faisán" con bola de tungsteno y algún "punto caliente", preferentemente de hilo flúor rojo, de esta manera podemos llegar con la ninfa a los peces que se encuentran cerca del lecho del río y seducirlos con el "punto caliente".

Para mi, la "Cola de faisán funciona mejor cuando se pesca en aguas rápidas donde el pez dispone de poco tiempo para inspeccionar la ninfa, mientras que para tramos más lentos donde los peces tienen más tiempo para observarla, es mejor un montaje realista para que sea más representativa de las ninfas y larvas naturales. Más sobre la ninfa "Cola de faisán" y su pesca aqui. 

La caña

 R.L. Winston IM6, 9" peso 4. Año 1990.

Mi caña favorita para pescar estas pequeñas efímeras a mosca seca es una de acción media o media-lenta, de entre 8" y 9" pies de larga y peso 4. Este tipo de cañas me permiten un excelente control de la línea de mosca y del bajo de línea, son ideales para lanzar distancias cortas y medias, y protegen como ninguna otra caña los tippets y terminales del 6X y 7X, necesarios para empatar estas diminutas moscas y para engañar a los peces más recelosos.

Me gusta la línea de mosca de peso 4 por su delicadeza inherente, y si es de doble uso mejor. Si bien es posible utilizar líneas descentradas más pesadas, un peso 4 me permite pescar con un bajo de línea más corto, de entre tres y cuatro metros sin sacrificar la delicadeza de la presentación de la mosca. Un bajo de línea de esta longitud, también se maneja mejor para presentar la mosca bajo las ramas de las orillas donde normalmente se encuentran los peces y con viento se atenúa ese problema.

La pesca y la distancia de lanzamiento 

La distancia de lanzamiento en este tipo de pesca de precisión debe ser corta (siempre que sea posible). Los lances de seis metros o menos son comunes, diez metros es un lanzamiento largo. Aquí es donde la mayoría de los pescadores poco experimentados cometen un grave error. Se mantienen demasiado lejos de los peces por temor a espantarlos, haciendo lances innecesariamente largos sobre diferentes corrientes y produciendo rápidamente el dragado de la mosca, desaprovechando así la posibilidad de engañar al pez en ascenso y a menudo asustando al resto de peces que están a su lado.

Mi consejo es acercarse lo más posible al pez que queremos lanzar sin que note nuestra presencia. Esto significa a veces permanecer agachado durante la aproximación. Ya sé que esto no es para todos, pero en la pesca con mosca los sacrificios casi siempre tienen recompensa. Para mí de todos modos, lo más importante es que los peces no te vean, porque puedes presentarles la mosca ideal, usar un bajo de línea de cualquier longitud y grosor, puedes tener el mejor carrete y la mejor caña del mercado, pero si los peces te han visto, no importa lo que les presentes, no tomarán tu mosca aunque sigan cebándose.

Si te encuentras con migo en el río, muchas veces me verás gateando o hacer cosas raras por el estilo (aunque uno ya no está para esos trotes). He pasado muchas horas arrastrándome de rodillas a través de la maleza para que las truchas no me vieran, en otras ocasiones para encontrar el ángulo ideal para presentar la mosca correctamente. Hay días en que los peces están súper alertas y no se moverán más de diez o vente centímetros de izquierda a derecha en su carril de alimentación para tomar la mosca. 

En estas situaciones de pesca, me doy cuenta de que cuando me siento cómodo en mi posición de lanzador, a veces estoy lanzando poco más que el bajo de línea. Otras veces en cambio, me quedo largo rato mirando como se alimentan los peces sin ni siquiera intentar pescarlos. Es genial verlos interactuar y pelearse entre ellos por conseguir una ubicación privilegiada. Uf! No hay nada mejor que ver a las truchas subir para engullir pequeños insectos que derivan por la corriente y estar a punto de lanzar tu mosca para engañar alguna. ¡O Dios mío! ¡Mira el tamaño de esa trucha! Planteamientos como estos requieren naturalmente saber acercarse a los peces sin asustarlos.

Lanzar distancias cortas ayuda no solo a obtener buena deriva de la mosca sin arrastre, sino que también facilita el seguimiento de la misma y a detectar la toma o el rechazo de la mosca por parte de la trucha. Cuando abundan los insectos naturales sobre la superficie del agua y varios peces se alimentan uno al lado del otro, es esencial vigilar la mosca de cerca para determinar si algún pez en ascenso ha tomado realmente nuestra mosca o una natural y clavar en el momento justo con suavidad pero con determinación. Además, los lanzamientos cortos son más precisos y más fáciles de controlar cuando el viento es un problema, y con estas presentaciones en corto se maneja mejor un pez clavado para llevarlo rápidamente a la sacadera sin necesidad de agotarlo.

Este tipo de pesca en distancias cortas a trucha vista se encuentra entre las experiencias de pesca con mosca más emocionantes que puede existir, porque puedes ver como se desarrolla todo el proceso hasta el más mínimo detalle. Puedes ver exactamente donde se posa tu mosca en relación con el pez que quieres pescar; puedes ver si la mosca se desplaza o no por el carril de alimentación del pez, y puedes ver la subida de la trucha y la reacción de esta a tu mosca, incluso si pescas a ninfa.

Debido a que las truchas cuando se alimentan en superficie o muy cerca de ella saben que son vulnerables y a menudo bastante asustadizas, la aproximación debe ser delicada y la presentación precisa.

El patrón

Todos sabemos que las truchas son maestras de la eficiencia (la vida le va en ello), y se posicionarán en el nivel del agua en función de donde se encuentre en ese momento la comida más fácil de atrapar. Por lo tanto, su comportamiento de alimentación seguirá a menudo a la eclosión en todas y cada una de las fases de la emergencia de estos pequeños insectos acuáticos.

Durante el comienzo de la eclosión, las truchas permanecerán en un nivel bajo alimentándose de las ninfas activas que salen de sus refugios para empezar a emerger. En esta primera etapa los peces son reacios a mirar hacia arriba, por lo tanto presentar una ninfa cerca del lecho del río es la mejor manera de capturar peces. 

Luego, cuando empiezan a emerger nadando en ondulantes movimientos de su abdomen hasta la superficie, los peces las seguirán haciendo una transición a una posición de medias agua. Finalmente, cuando las ninfas emergentes atraviesan la película superficial del agua para convertirse en insectos alados, las truchas comenzarán a capturarlas en la parte superior o justo por debajo cuando queden atrapadas en el menisco intentando salir al exterior.

Debido a que las eclosiones de la Baetis rhodani son una atracción para las hambrientas truchas en cualquiera de sus fases de emergencia, es importante estar preparado con patrones que representen cada una de esas fases: ninfa, emergente, seca y tándem seca-ninfa.

-Ninfa:

Los siguientes cuatro patrones de ninfa son algunos de mis favoritos:

Ninfa "Oreja de liebre" con saco alar UV y bufanda fluor, #16, 2.8


Ninfa "Cola de faisán", #16 con bola de tungsteno 2.5 camuflada en el tórax y punto caliente.


Ninfa-Perdigón "Aceituna", #16, 2.8 cobre, con bufanda flúor.

Ninfa-Perdigón "Oliva" #16, 2.5 plata

La Baetis rhodani es un insecto pequeño, por lo que los patrones de ninfas más chicos son las mejores imitaciones. Para que una imitación de ninfa sea efectiva en esta primera fase de la eclosión, necesita llegar al fondo lo antes posible y que en su deriva vaya arañando las piedras del lecho del río. Sin embargo, su efectividad radica en llevarla un poco por encima de las piedras, en la "zona de ataque" o "zona caliente".

La clave para que casi cualquier patrón de ninfa de pequeño y mediano tamaño alcance rápidamente la profundidad deseada, es crear un perfil delgado como los "perdigones". Es por esta razón que la ninfa-perdigón es un patrón excelente para imitar a las ninfas de la Baetis rhodani. Un cuerpo de seda delgado, brincado con hilo de alambre, cubierto con resina ultravioleta y una bola de tungsteno, da como resultado propiedades físicas que permiten que este patrón de ninfa alcance rápidamente el fondo, casi como una piedra.

Cuando las ninfas de la Baetis rhodani se activan por primera vez y empiezan a salir de sus refugios para eclosionar, un "perdigón", una cola de faisán o un "Frailuco" al ras del lecho del río, son los mejores patrones para engañar truchas. Más sobre la larva-ninfa del "Frailuco"

-Mosca ahogada como emergente para pescar a medias aguas

Todos sabemos lo caprichosas que pueden llegar a ser las truchas a la hora de alimentarse. A veces prefieren tomar las moscas en superficie cuando navegan altas como los subimagos recién eclosionados, otras veces, en cambio, las prefieren tomar cuando derivan placadas sobre la superficie del agua como emergentes, y la mayoría de las veces las prefieren tomar justo debajo de la película superficial del agua como ninfas emergentes.

Este comportamiento de las truchas obedece a diferentes factores como la temperatura del agua, tipo de insecto emergente, tipo de río, época de eclosión, etc. Sin embargo, existen otro muchos factores que desconocemos como pudiera ser la sobrepesca en algunos tramos, etc.

La "Aceituna". Mosca ahogada como emergente para sedal pesado.

La mosca ahogada es uno de mis patrones favoritos para imitar a las emergentes de la Baetis rhodani (y de cualquier otra mosca). Con este patrón de mosca ahogada para sedal pesado he capturado a lo largo de los años muchas truchas. Con esta mosca se puede pescar a medias aguas en tándem con una ninfa-perdigón de punta o justo por debajo de la película superficial del agua en tándem con una mosca seca.

A menudo, durante los primeros momentos o incluso antes de la eclosión de la Baetis rhodani, suelo atar una mosca ahogada de colgadera a un codal o hijuela de 15 cm y a 50 cm (dependiendo de la profundidad) una ninfa-perdigón de punta. Esto me permite matar dos pájaros de un tiro, pescar el fondo con el perdigón y a medias aguas con la mosca ahogada como emergente.

-Mosca seca (lisiado)

Las truchas, como cualquier otra especie cazadora, están especialmente dispuestas a capturar aquellos insectos que por una razón u otra le son más asequibles. Es el caso de los insectos que derivan sobre la superficie del agua con alguna anomalía en sus cuerpos que les impide levantar el vuelo, siendo presas fáciles para las voraces truchas.

Estos montajes ya fueron descritos por Jack Dennis Kelly Galloup en su libro "Gripples and Spinners" publicado en el 2001. Más sobre la Gripple de Galloup aquí

Montaje clásico de subimago Baetis rhodani con exhuvia (lisiado), #16-18, para principios de temporada.

Recuerda, las "aceitunas" (Baetis rhodani), suelen eclosionar durante el tiempo desapacible de lluvia y frío que generan humedad. Esta humedad retrasa el tiempo en que los subimagos necesitan para secar sus alas y volar a un lugar seguro donde poder transformarse en un insecto adulto (imago). Cuanto mayor sea la humedad en el aire, más vulnerables serán los subimagos que han conseguido emerger a la superficie. Este mal tiempo no solo parece alentar a las "aceitunas", sino que también mejoran las oportunidades de pesca con mosca seca al aumentar el tiempo que los insectos tienen que permanecer en la superficie del agua antes de que se puedan escapar de las voraces truchas y salir volando.

En esos días de tiempo desapacible, un patrón clásico de la "aceituna" con exhuvia, es una excelente opción para seducir a las truchas a mosca seca, ya que puede usarse para imitar de manera efectiva al subimago lisiado de la Baetis rhodani que lucha por salir volando ante la imposibilidad de desprenderse totalmente de su envoltorio ninfal, (fotografía superior).

Aunque estos son mis patrones favoritos, no es esencial que se conviertan en los tuyos. Lo realmente importante es recordar que las truchas adaptaran su comportamiento alimenticio y su posición en el agua en función de la progresión de la eclosión.

Tener al menos estos patrones o similares que imiten cada una de las diferentes etapas de la vida de la Baetis rhodani, te permitirá cubrir cada una de las situaciones posibles cuando pesques una eclosión de "aceitunas".


Otros patrones de la Baetis rhodani

Emergente CDC, #16-18-20


Montaje clásico de subimago con exhuvia (lisiado) para septiembre y octubre. Pluma indio acerado claro, #18-20-22-24.

Montaje clásico de subimago Baetis rhodani con exhuvia (lisiado), para principio y mediados de temporada. Pluma indio acerado medio y oscuro, #16-18-20. 

La "aceituna". Emergente CDC. #18-20


Montaje invertido en paracaídas. #16, USD-Paradun, (Baetis Rhodani)

Más sobre la historia de los montajes invertidos


Montaje de la Baetis rhodani en paracaídas CDC. # 16-18


Imago hembra Baetis rhodani. Montaje agotado o muerto (spent), cuerpo faisán #16-18


La "Aceituna". Emergente CDC, #16-18-20

La selección del patrón de la Baetis rhodani naturalmente es personal. Muchos patrones diferentes funcionan bien, pero yo, cuando las truchas están activas comiendo arriba, casi siempre comienzo pescando con algún montaje en paracaídas o con alguna emergente, otras veces, en cambio, lo hago con un montaje clásico con exhuvia (lisiado) o con algún montaje comparadun de pelo de ciervo. 

Estos montajes representan la última fase de la emergencia de un insecto acuático: placan bien sobre la superficie del agua, tienen buena visibilidad y son duraderos, y lo más importante, pescan truchas, ya sea que se estén alimentando de subimagos o de ninfas emergentes. Estos montajes me han demostrado a lo largo de los años ser muy eficaces en el Esla y en otros ríos.

Montaje Comparadun de pelo de ciervo, #16-18

La "aceituna". Montaje Comparadun #16-18

Los montajes comparadun son moscas sin collar de flotación, muy sencillas de montar y de una eficacia indiscutible. Por desgracia, estas artificiales no son lo suficientemente conocidas ni valoradas por la gran mayoría de los pescadores con mosca de este país, aunque los pocos aficionados que las empleamos sabemos de sobra que las truchas opinan de un modo muy diferente.

Estos montajes fueron presentados por Al Caucci y Bob Nastasi allá por la década de los setenta, inspirados según ellos por un antiguo modelo de los años cuarenta, la "Haystack" (la Alpaca) de Francis Betters.

La "Alpaca" es una mosca realmente antigua, sin embargo, a lo largo de los años ha generado algunos patrones increíblemente efectivos que son bien conocidos fuera de nuestras fronteras como los Comparadun de pelo de ciervo o alce, o la famosa "Sparkle Dun" son algunos de los derivados más populares. Otra variante de esta antigua mosca es la "Usual", que es bastante similar a las otras dos, pero usa para el montaje de las alas pelo de liebre ártica o ternero en lugar de pelo de ciervo o alce.

Las comparadun son moscas que flotan muy aplacadas a la superficie del agua apoyando todo el abdomen y sujetas sobre la película superficial del agua por los cercos y algunos pelos de la base de las alas, comportándose de esta manera como una emergente. El resto de las alas en vertical respecto de la superficie del agua hace que estas moscas sean muy visibles y muy cómodas de usar en acción de pesca.

El verdadero secreto de estos montajes comparadun está en la correcta elección del pelo para formar las alas abiertas en abanico de 180º grados y los cercos en V.

La "Haystack" (la Alpaca). Mosca antigua.

La "Haystack", vista superior.

Otras variantes de la "Alpaca" son los montajes emergentes CDC, sustituyendo en este caso el pelo por la pluma CDC. Estos montajes emergentes con pluma CDC (cul de canart o "culo de pato") si son muy populares entre los pescadores con mosca de este país. Tal vez esto se deba a que son más fáciles de montar, sobre todo en anzuelos más pequeños. Otro aspecto favorable de este material CDC para el montaje de moscas es la flexibilidad que tienen las fibras de su pluma. Cuando la mosca flota y deriva sobre la superficie del agua, una ligera brisa es suficiente para hacerlas moverse dando a la artificial una apariencia de vida.

Otra de las ventajas del CDC que explica la popularidad de este material entre los pescadores con mosca de este país, es la flotabilidad natural que posee sin necesidad de aplicar flotabilizador artificial para moscas. También ha contribuido a su éxito la simplicidad de los montajes, pues no es necesario ser un gran montador para realizar perfectamente una mosca emergente CDC. 

Sin embargo, la pluma de "culo de pato" también tiene sus limitaciones. La pluma de "culo de pato" posee dos grandes virtudes: proporciona posadas delicadas y su flotabilidad es extraordinaria, sobre todo en aguas lentas y corrientes moderadas, pescando aguas rápidas de nuestros ríos naturales, su comportamiento es bueno durante los primeros lances, pero después de haber sido sumergida varias veces por remolinos u otras causas, la mosca pierde flotabilidad que no es fácil volver a recuperar.
Retirar la mucosidad que desprende la boca de la trucha después de algunas capturas, tampoco es fácil. 

Estos son sus dos mayores inconvenientes. Sin embargo, son muchos más los beneficios que proporciona esta extraordinaria pluma empleada por primera vez en un pequeño pueblo de Suiza, en el cantón suizo del Jura, muy cerca de la frontera con Francia. Más sobre la hitoria del CDC aquí. 

-La pesca en tándem seca-ninfa "estilo ligero"

La pesca con este aparejo implica el uso de una mosca seca para que actúe principalmente como indicador de picada. En otras palabras, una mosca seca que flote bien y que tenga buena visibilidad. Este aparejo permite al pescador presentar en tándem una ninfa ligera tipo perdigón o una mosca ahogada como emergente a pocos centímetros por debajo de la superficie del agua.

La pesca en tándem seca-ninfa "estilo ligero"  es una técnica que la uso cuando intuyo que existe la posibilidad de que alguna trucha se decida por la mosca seca. Sin embargo, esta técnica de pesca está más indicada para pescar aguas poco profundas, cuando los peces miran hacia arriba, especialmente para esos días en los que parece que las truchas se han encerrado en una zona de alimentación a pocos centímetros de la superficie del agua atrapando ninfas emergentes y no quieren saber nada de otra cosa. Lo último que quisiéramos en estos casos, sería presentar una ninfa o una mosca ahogada como ninfa emergente por debajo de los peces que se están alimentando activamente a escasos centímetros de la superficie. ¿No es verdad?

En cuanto a que patrón de mosca seca usar, lo más lógico es emparejar la eclosión, es decir, en nuestro caso la mejor opción sería un montaje clásico de la "aceituna". Es una mosca que flota como un corcho, tiene buena visibilidad, aguanta perfectamente una ninfa liviana y no necesita mantenimiento. Otra opción sería un montaje CDC emergente. En fin, se me ocurren otros patrones, pero creo que con esos dos es más que suficiente.

La "Aceituna". Esta mosca ahogada para sedal pesado, puede actuar como emergente a medias aguas en tándem con una ninfa de punta o justo pescar a escasos centímetros por debajo de la superficie del agua en tándem con una mosca seca.

La "aceituna", vista superior

Ninfa emergente "estilo leonés". La misma función que la mosca ahogada. 

El patrón de ninfa, ya sea un perdigón, una cola de faisán, una mosca ahogada o una ninfa emergente "estilo leonés" debe ser liviano con muy poco peso, lo suficiente como para romper la tensión superficial del agua y caer varios centímetros por debajo de la superficie. La clave para pescar con ninfa no siempre es pescar a gran profundidad, sino llevar las moscas donde se estén alimentando los peces.

Durante los momentos en que las truchas están concentradas en atrapar ninfas emergentes muy cerca de la superficie del agua, esta técnica en tándem seca-ninfa "estilo ligero" es una excelente opción. 

Más sobre la pesca en tándem seca-ninfa en este enlace: tres estilos de pesca en tándem seca-ninfa

La Serratella ignita, otra magnífica mosca para final de temporada.

"Una mosca imprescindible cuando aparece flotando sobre la superficie del agua"

Serratella ignita, la Efemera "Carne" #18-20. Montaje clásico de subimago con pluma indio acerado medio para mediados de temporada.
 

Serratella ignita, la Efemera "Carne". Montaje clásico de subimago con exhuvia y cercos (lisiado), para mediados y final de temporada. Pluma indio avellanado medio y claro, #18-20-22.

Serratella ignita, la "Carne". Emergente CDC #18-20

Con el montaje de la Baetis rhodani en cualquiera de sus variantes, podemos cubrir otros Bétidos que eclosionan en los meses veraniegos hasta final de temporada. Estos patrones también sirven para imitar otra gran mosca que suele eclosionar en esta época al mismo tiempo que la Baetis rhodani, se trata de la Serratella ignita, perteneciente a la familia de los Ephemerellidae

La Serratella ignita es una mosca pequeña (5-7mm) que se puede identificar por sus alas grises ligeramente azuladas. Sin embargo, el rasgo más característico para diferenciar a las dos especies es que la Baetis rhodani tiene dos cercos y la Serratella ignita tres. Además, esta última, la coloración del cuerpo es variada con predominio de tonos oliváceos en los subimagos hembras y rojizos anaranjados en los subimagos machos, de ahí el sobrenombre que algunos pescadores leoneses han bautizado a esta mosca, La "carne" o "carnina", también conocida como la Efemera "oliva", mientras que el cuerpo de los subimagos de la Baetis rhodani es de un verde aceituna más o menos desvaído, dependiendo de si es macho o hembra, de las condiciones de luz con que observemos al insecto, de la época de eclosión o de la temperatura del agua, por citar algunos parámetros.

Serratella ignita, La "Oliva". Montaje clásico con exhuvia, para final de temporada, #20-22-24

Serratella ignita. La "oliva". Emergente, #18-20

Serratella ignita, Efemera "Oliva". Emergente CDC #18-20


Serratella ignita, La "Oliva". Montaje clásico con exhuvia (lisiado), para mediados y final de temporada, #18-20-22

Para finalizar

Creo que cualquier pescador con mosca se deleitaría pescando una eclosión de Baetis rhodani o de ignitas en el Esla en otoño o en cualquier otra época de la temporada, pero sobre todo en otoño. 

Es un verdadero placer ver pequeñas moscas navegando por las tablas y raseras del Esla y truchas subiendo para alimentarse de ellas. Incluso cuando el clima está en su peor momento y sé que voy a mojarme y pasarlo mal, un vistazo a los peces en ascenso es todo lo que necesito para convencerme de ensartar mi caña y darme la oportunidad de resarcirme de algunas frustraciones que he tenido a lo largo de la temporada de pesca.

Que todos tengamos la suerte de tener esa oportunidad. Buena pesca.

Comentarios

  1. Una buena lectura, genial. Gracias.

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  2. Un fantastico articulo muy bien detallado y sin que le falta nada .Si alguien tenia una duda de donde,cuando y como aqui tiene todas las respuestas y algo mas.Te felicito por este gran articulo.Un saludo amigo Alberto,farioreo

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    1. Bueno Alberto, muchas gracias por tu comentario, pero algunas cosas siempre quedan en el tintero.
      La pesca con mosca es muy variada y compleja y sería imposible abarcar todo en un solo artículo. Además, hay otros pescadores con mosca con opiniones diferentes y tal vez para escribir de esto con más propiedad que yo. Un saludo.

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  3. Es usted un pozo de sabiduría, me quito el sombrero y gracias por sus publicaciones.

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    1. Gracias a usted por su amable comentario. Mi intención no es otra que ayudar a los pescadores dentro de mis posibilidades a que conozcan mejor el mundo de la pesca con mosca. Un saludo.

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